Falta valentía para construir una UE inclusiva

Fecha: 19 May 2017

​El Secretario de Política Internacional de UGT, Jesús Gallego, ha asegurado que “falta valentía” para construir una UE inclusiva, en la que se respeten los derechos laborales y sociales y ha alertado que de seguir las políticas de austeridad y recorte, continuará la desafección ciudadana sobre el proyecto europeo. Por ello, hay que cambiar las reglas  para salir de la crisis, porque “no renacerá la esperanza social, si no cambia la política económica” y para ello es preciso apostar por políticas de crecimiento y empleo de calidad, un pacto por un nuevo modelo productivo, ecológico y social.

Gallego ha hecho estas declaraciones durante su intervención en el debate sobre el futuro de Europa, organizado por el Comité Económico y Social Europeo (CESE) y el Consejo Económico y social (CES), que recoge las opiniones de distintos representantes de la sociedad civil española.

Gallego, ha señalado que se habla mucho de la crisis de la socialdemocracia en Europa, pero nadie habla de la crisis de la derecha, que ha abanderado la construcción de una Unión Europea en la que han crecido las desigualdades, lo que ha provocado el descontento social, el surgimiento de movimientos populistas de derechas e izquierdas y el repliegue a los ámbitos nacionales, lo que pone en riesgo el proyecto común.  La crisis europeísta, ha sido especialmente “democrática”.

Por ello, es preciso  avanzar hacia políticas comunes europeas, en áreas como los flujos migratorios (“hay levantamiento de fronteras para las personas en la UE, pero no así para el capital”- ha dicho Gallego), las políticas energéticas, el cambio climático, el terrorismo internacional, la seguridad alimentaria, la política comercial, la lucha contra la delincuencia organizada, un eficaz plan europeo de inversiones y de creación de empleo, una dimensión social europea, o completar el mercado interior. “Los ciudadanos europeos solo darán un viraje a la actual desafección, se sentirán europeos y se comprometerán con la Unión, si la UE cambia de rumbo y se posiciona como promotor de su seguridad, libertad y prosperidad”.

Asimismo, el Secretario de Política Internacional ha pedido que las “instituciones de la UE deben ser más democráticas, transparentes, responsables y eficientes”, porque los trabajadores y los ciudadanos quieren “sentir que su voz es escuchada por aquellos que toman las decisiones”.

En este sentido, las elecciones europeas deben ser una oportunidad para la participación democrática real, dando a las personas la posibilidad de influir en las políticas y la gobernanza europeas y en la composición de la Comisión Europea. La Comisión Europea debe disponer de un poder ejecutivo sólido, al tiempo que se refuerza el control democrático y la iniciativa legislativa del Parlamento Europeo.
Por otro lado, el diálogo social, entre los interlocutores sociales y a nivel institucional, y la participación de los trabajadores y la influencia sobre la política corporativa deben ser apoyados y reforzados, para que sean más fuertes y plenamente aplicados en los Estados miembros.

La Unión Europea se encuentra ahora en una encrucijada: o se remodela y reforma en una Europa más justa y más social, o colapsará.  Se necesita con urgencia el cambio, y el movimiento sindical europeo debe contribuir a él, junto con todos los que están preocupados por el futuro de Europa.

 

Fuente: UGT