El movimiento sindical europeo exige salarios mínimos que caminen hacia el 60% del salario medio

Al menos, 17 Estados miembros de la UE dejan a las personas trabajadoras en riesgo de pobreza

La Unión General de Trabajadores, en consonancia con la Confederación Europea de Sindicatos (CES), reclama la necesidad de que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vaya alcanzando el 60% del salario medio al final de la Legislatura. Los salarios mínimos legales están dejando a los trabajadores y trabajadoras en riesgo de pobreza en, al menos, 17 Estados miembros de la UE, como señala la OCDE con datos de 2018.

Las personas que perciben el salario mínimo legal están en riesgo de pobreza en la mayoría de los Estados miembros de la UE, según muestran los últimos datos oficiales.

Veintidós Estados miembros de la UE tienen un salario mínimo nacional legal y la mayoría no cumple ni siquiera el umbral de salario mínimo en riesgo de pobreza del 60% del salario medio. En 10 Estados miembros, el mínimo legal es del 50% o menos del salario medio nacional.
Significa que millones de personas en toda Europa no pueden permitirse un nivel de vida decente a pesar de trabajar a tiempo completo. España, Chequia y Estonia tienen los niveles más bajos de salarios mínimos legales en comparación con los ingresos medios, según la OCDE (datos de 2018).
 

La CES quiere destacar estos datos en el momento en que la Comisión Europea está realizando la consulta sobre sobre cómo cumplir con la promesa de Ursula von der Leyen para garantizar que los trabajadores en la UE tengan salarios mínimos justos.

La Secretaria General Adjunta de la CES, Esther Lynch, ha declarado:

“El objetivo de un salario mínimo es establecer una línea divisoria entre la decencia y la pobreza. El hecho de que la mayoría de los salarios mínimos legales en toda la UE se establezcan sabiendo que están por debajo del umbral de pobreza es escandaloso. Si alguien trabaja a tiempo completo, no debería verse obligado a elegir entre poner la calefacción y comer.

La Comisión necesita ser clara sobre lo que considera un salario mínimo legal justo. Ciertamente, no puede estar por debajo del punto de referencia del 60% del salario medio nacional, que es el umbral de riesgo de pobreza.

Es necesario comprobar si este umbral es adecuado frente a los precios reales (y una cesta de bienes y servicios) definidos por los sindicatos y los empresarios a nivel nacional para que los salarios mínimos se conviertan en salarios reales.

Esto debe combinarse con medidas para promover la negociación colectiva, que es la mejor manera de acabar con los salarios que mantienen o empeoran los niveles de pobreza.”

Fuente: UGT