UGT condena la agresión del Ejército israelí a la confederación sindical palestina PFGTU
El sindicato reafirma su compromiso con la paz y con el dialogo como única vía para solucionar los conflictos
Fecha: 17 Oct 2025
El pasado miércoles, 15 de octubre, el Ejército y la inteligencia israelí asaltaban y ocupaban la sede de la PGFTU, principal confederación sindical palestina, en Nablus (Cisjordania). Los asaltantes tomaron como rehenes a compañeros del sindicato mientras procedían a un resguardo y confiscaban todo tipo de documentación, en lo que constituye un nuevo ejemplo de la persecución por parte de Israel a organizaciones sindicales libres y democráticas que tienen un largo recorrido en la defensa de la paz: la PGFTU ha defendido siempre el diálogo como única vía de solución de conflictos.
No hay justificación posible por parte de Israel: las compañeras y compañeros palestinos han sufrido numerosas violaciones de este tipo, durante su VII Congreso en Ramallah este pasado mes de mayo, en las que el Ejército irrumpe sin justificación alguna y tras realizar sus condenables acciones no existe ningún tipo de reparación para los afectados.
Una estrategia intimidatoria e ilegítima que Israel realiza en un territorio que es parte del Estado Palestino. Incluso si Israel considerase ilegal y equivocadamente que tiene jurisdicción sobre ese territorio, la intervención del Ejército supone una violación de la libertad sindical en Israel, por lo que se evidencia que, más allá de la persecución a las y los palestinos, el Gobierno del ultraderechista Netanyahu persigue al sindicalismo que denuncia al resto de la familia sindical internacional la verdadera cara de un Estado genocida.
Lamentablemente, cada vez parece más claro que el débil e injusto acuerdo de paz no va a cumplir ni con el alto al fuego. De hecho, ya hay nuevos fallecidos palestinos a manos del Ejército de Netanyahu. Israel, con todos sus rehenes devueltos, sigue incidiendo en la necesidad de victoria total y de continuar la guerra. Para ellos la amenaza seguirá existiendo siempre y cuando exista el pueblo palestino y este siga con sus justas reivindicaciones, ya sea población civil u organizaciones sindicales como la PGFTU. Para Netanyahu y su Gobierno ultraderechista el uso de la violencia no estará injustificado hasta que no hayan completado su plan genocida de muerte y destrucción.
UGT expresa su más firme condena al ataque sufrido por sus compañeras y compañeros en Nablus y reafirma su compromiso con la paz y con el diálogo como única vía para solucionar los conflictos. Este diálogo debe ser justo, entre partes iguales y que no obligue al pueblo palestino a elegir entre la destrucción inmediata o falsas promesas a cambio de un alto al fuego que se puede romper cuando lo desee el Ejército israelí.
