Los datos de empleo publicados hoy confirman que el mercado laboral español atraviesa un momento histórico. España registró en septiembre 31.500 afiliados más a la Seguridad Social y 4.900 parados menos, alcanzando los 21,7 millones de ocupados, máximo de la serie histórica para un mes de septiembre, y reduciendo el paro a 2,42 millones, el nivel más bajo desde 2007.

Todo ello a pesar de que septiembre es un mes fuertemente determinado por la estacionalidad, con la vuelta a la actividad de muchas empresas que cierran en vacaciones y el fin de la temporada alta de verano, por lo que el número de personas registradas como paradas en los servicios públicos de empleo suele aumentar; pero en esta ocasión, por primera vez desde 2007 (exceptuando los dos años de pandemia), se ha reducido.

El aumento de afiliación a la seguridad social también es muy positivo, contabilizando el mayor incremento mensual de toda la serie histórica con excepción de los datos de 2020 y 2021, en plena pandemia. Con respecto al mismo mes del año anterior, la afiliación ha crecido casi en medio millón de personas (499.495), repuntando el ritmo de creación de empleo hasta el 2,36%, el más elevado desde febrero de este año. Si descontamos los efectos de la estacionalidad, la afiliación crece en 56.700 personas respecto a agosto.

Los datos sectoriales son especialmente ilustrativos: el empleo ha crecido con fuerza en educación (+64.000), construcción (+4.800), actividades científicas y técnicas (+9.900) y campo (+14.000), sectores claves para el desarrollo económico y social de nuestro país.

En términos de contratación, se han registrado un total de 1.533.733 contratos, de los que 663.825 son indefinidos, suponiendo el 43,1% de la contratación, un porcentaje que ha crecido en 32 puntos respecto al mismo mes de 2021, antes de aprobarse la reforma laboral. La modalidad más estable, la indefinida a tiempo completo, registra 269.782 contratos, aumentando en 1,8 puntos su peso en la estructura de contratos, hasta el 17,5% del total, casi el triple del porcentaje contabilizado antes de la reforma (6,5%). 

Además, la temporalidad de la afiliación vuelve a reducirse este mes, esta vez en 0,9 puntos, hasta el 12,6%. De este modo, la tasa de temporalidad se sitúa 15,8 puntos por debajo de la registrada en el mismo mes de 2021, antes de que entrara en vigor la reforma laboral. Esto demuestra cómo la nueva normativa laboral sigue siendo plenamente efectiva para corregir uno de los principales problemas endémicos de nuestro mercado de trabajo. 

Si dejamos al margen los dos ejercicios excepcionales de la pandemia de la covid-19, nos encontramos ante los mejores resultados de toda la serie histórica, lo que demuestra una vez más que los derechos laborales impulsan la economía.

Estos datos confirman que la subida de los salarios y, de manera especial, el importante incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) no solo no destruye empleo, sino que fortalece y mejora sustancialmente el comportamiento del mercado de trabajo. 

Por ello, desde UGT reclamamos que la negociación del SMI de 2026 se aborde con determinación: debe subir con suficiencia y con rotundidad, y hacerlo además con efectos netos a nivel fiscal, excluyendo pluses y complementos, para garantizar su auténtica función protectora.

No obstante, pese a los buenos resultados, persisten retos estructurales graves. España sigue registrando una de las tasas de paro más altas de la Unión Europea (10,4%, frente al 5,9% de la media comunitaria), con especial incidencia en el paro de larga duración, que afecta a un porcentaje inaceptable de trabajadores y trabajadoras.

Por ello, UGT reclama:

•    Políticas públicas activas de empleo más eficaces, centradas en la empleabilidad y en la reinserción de las personas desempleadas de larga duración.
•    Reforzar la protección del contrato de trabajo, adecuando la legislación española a los compromisos internacionales derivados de la Carta Social Europea, que obligan a garantizar la estabilidad en el empleo.
•    Continuar con la senda de mejora salarial y reducción de la jornada laboral, como elementos indispensables para avanzar hacia un mercado laboral justo, inclusivo y sostenible.

En definitiva, los datos de septiembre muestran que España progresa cuando se apuesta por derechos, salarios dignos y estabilidad. Ahora toca consolidar ese avance y afrontar con valentía los problemas pendientes de nuestro mercado de trabajo.

Datos de interés

El paro registrado ha disminuido en 4.846 personas, reduciéndose por primera vez desde 2007 (a excepción de los dos años de pandemia). Con ello, se sitúa en un total de 2.421.655, la cifra más baja en un mes de septiembre desde 2007. Por su parte, en términos anuales, el paro ha descendido en 153.620 personas.

• Las mujeres registradas como desempleadas se reducen en 2.827 respecto a agosto, mientras que los hombres lo hacen en 2.019. En consecuencia, hay 1.468.904 mujeres desempleadas y 952.761 hombres. Con respecto al mismo mes del año anterior, el desempleo femenino se reduce en 84.834 mujeres (-5,5%) y el masculino en 68.786 hombres (-6,7%). Con estas cifras, las mujeres representan el 60,7% de las personas en desempleo. 
• El desempleo entre los menores de 25 años aumenta en 16.085 personas (9,6%) este mes, y se sitúa en un total de 183.716. En términos interanuales, el desempleo juvenil ha descendido un 4,4% (8.423 jóvenes desempleados menos). 
• En lo que se refiere a los trabajadores extranjeros, el número de parados registrados aumenta en septiembre en 3.300 personas; situándose en un total de 325.908 personas extranjeras desempleadas. En términos anuales, se observa un descenso del 4,1%, lo que implica 14.068 trabajadores extranjeros desempleados menos. 
• Con respecto al mes anterior, se registra una caída del paro en todos los sectores. En construcción desciende en 4.670 personas (-2,6%), en servicios en 3.067 personas (-0,2%), en la industria cae en 14.22 personas (-0,8%) y en agricultura disminuye en 1.166 personas (-1,5%) Con respecto al colectivo sin empleo anterior, el paro aumenta en 5.479 personas (2,5%).
• El número medio de personas afiliadas a la Seguridad Social aumentó en el mes en 31.462 personas, siendo el total de 21.697.665 personas afiliadas, la mayor cifra de la serie histórica en un mes de septiembre. Por su parte, hay 499.459 personas afiliadas más que el año pasado, registrando un crecimiento interanual del 2,4%.
• Por su parte, la variación desestacionalizada muestra un incremento de 56.700 afiliados y se sitúa en 21.728.949 personas. Asimismo, desde enero de este año, se han creado 329.785 empleos. Por su parte, la tasa de temporalidad de las personas afiliadas a la Seguridad Social cae al 12,6%, mientras que antes de la reforma laboral era del 28,4% en ese mismo mes. 
• Por su parte, el volumen total de contratos aumenta con respecto al mes anterior en 493.811 contratos (47,5%) y en términos anuales lo hace en 120.090. Lo hace además incrementado el peso de los indefinidos sobre el total de contratos hasta el 43,3%, 6,2 puntos más que el mes anterior.
• La modalidad de contratación a tiempo completo se sitúa en el 55,4% del total de contratos. Por su parte, la modalidad más estable de contratación, los indefinidos a tiempo completo, suponen el 17,5% del conjunto de contratos y, la más precaria, los temporales a tiempo parcial, el 18,9%.
• Por último, el número de beneficiarios de prestaciones se situó en agosto en 1.875.821 personas, un 1,6% superior a los existentes el mismo mes del año anterior (1.845.877). Con este nivel de protección, la tasa de cobertura en el mes fue del 82,5% (6 puntos mayor a la del año anterior), el mejor dato de toda la serie histórica.