Es fundamental seguir impulsando los salarios y moderar los beneficios empresariales

El IPC adelantado de marzo sube debido al aumento de la factura eléctrica y el combustible

Fecha: 27 Mar 2024

ipc adelantado marzo

Los datos del IPC adelantado del mes de marzo, publicados hoy por el INE, sitúan la inflación anual en un 3,2%, cuatro décimas más que en febrero, debido al encarecimiento de la factura eléctrica, a la reintroducción de los impuestos que se habían eliminado durante la crisis energética y al aumento del precio de los combustibles, tras la escalada continuada del precio del crudo desde diciembre del año pasado.

Por su parte, la tasa subyacente, que recoge la inflación de componente más estructural, se reduce dos décimas respecto al mes anterior, alcanzando una variación anual del 3,3%, su nivel más bajo desde febrero de 2022, acumulando ocho meses consecutivos de bajada interanual.

Para UGT, es necesario seguir consolidando la mejora de la inflación, que pese a mostrar una tendencia positiva en los últimos meses, sigue estando ligada al encarecimiento de productos básicos como los alimentos, manteniendo niveles muy elevados e inaccesibles para el bolsillo de buena parte de la clase trabajadora. 

Por ello, el sindicato reclama la moderación de los márgenes empresariales, que alcanzan cotas históricas en algunos sectores, con el objetivo de garantizar unos precios asequibles y seguir impulsando la senda de crecimiento salarial. Cabe recordar que las subidas salariales medias pactadas en convenio (2,8%) se sitúan aun ligeramente por debajo del criterio recogido en el V AENC (2022-2025), que establece un 3% para 2024, con una cláusula de revisión de un punto adicional para el caso de que el IPC supere este incremento. 

En este sentido, UGT considera imprescindible que se incremente el volumen de trabajadores y trabajadoras protegidos por cláusulas de revisión salarial, cuya cobertura actual es del 35%, muy por debajo de los niveles alcanzados antes de la crisis de 2008, que oscilaban en torno al 70%. Se trata de una herramienta fundamental para proteger a las personas trabajadoras ante desviaciones imprevistas en el nivel de precios, más si cabe en un contexto como el actual, donde la incertidumbre geopolítica amenaza el proceso de estabilización de los mismos.


Fuente: UGT