Día mundial contra la desertificación y la sequía

Hoy, 17 de junio, se celebra el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, con el que la ONU tiene como objetivo el concienciar acerca de las iniciativas internacionales para combatir estos graves fenómenos

Fecha: 19 Jun 2023

Desertificación
#Herland, Mujer, Sus tierras, Sus derechos

La desertificación es la degradación de la tierra en las zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas por causa de la actividad humana y las variaciones climáticas. Este proceso se debe a la vulnerabilidad de los ecosistemas de zonas secas (que cubren un tercio de la superficie del planeta y buena parte de España), a la sobreexplotación y al uso inadecuado de la tierra. La pobreza, la deforestación, el sobrepastoreo y las malas prácticas de riego son ejemplos de aspectos que afectan negativamente a la productividad del suelo.

La desertificación y la sequía suponen grandes retos para la humanidad ya que afectan tanto al estado de la naturaleza como a los medios de vida de millones de personas en su lucha contra la pobreza. Ya en la Cumbre de la Tierra, que se celebró en Río de Janeiro en 1992, la desertificación junto con el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad, se catalogaron como los mayores retos a los que se enfrenta el desarrollo sostenible. Pero desde entonces el problema ha seguido empeorando. Hoy en día, más de 2.000 millones de hectáreas de tierras anteriormente productivas se encuentran degradadas. Algo especialmente preocupante si se tiene que en cuenta que para 2030 se estima que la producción de alimentos requerirá otros 300 millones de hectáreas adicionales de superficie.

Este año, el lema del Día es "Mujer. Sus tierras. Sus derechos", con el que se quiere hacer especial hincapié en la idea de que invertir en la igualdad en el acceso de las mujeres a la tierra y a los bienes asociados es una inversión directa en su futuro y en el futuro de la humanidad. Es hora de que las mujeres y las niñas se sitúen a la vanguardia de los esfuerzos mundiales en la recuperación de la tierra y en la resiliencia a la sequía.

En la actualidad, casi la mitad de la mano de obra agrícola mundial es femenina, pero menos de uno de cada cinco propietarios de tierras en todo el mundo son mujeres. En todo el mundo, las mujeres dedican ya 200 millones de horas diarias a recoger agua. En algunos países, un solo viaje para recoger agua puede llevar más de una hora. Las mujeres y las niñas son especialmente vulnerables ante los impactos del cambio climático, y suelen ser las más afectadas por sus consecuencias, como la sequía y la degradación de la tierra. Además, suelen cargar con la mayor parte de las responsabilidades asociadas a enfrentar estos desafíos.

Las voces de las mujeres son cruciales para sensibilizar sobre las desigualdades existentes en la propiedad de las tierras y en la toma de decisiones respecto a estas. La igualdad de género es un fuerte catalizador para el progreso ambiental efectivo, por ello es primordial que las mujeres formen parte de todos los procesos de toma de decisiones.

Desde UGT, consideramos que este Día Mundial brinda una oportunidad única para poner en el centro del debate una problemática tan grave como las sequías y la desertificación. España es uno de los países que más va a sufrir las consecuencias del cambio climático, y uno de los mayores impactos se va a dar en los recursos hídricos. Eventos meteorológicos extremos como sequias, olas de calor o lluvias torrenciales van a repercutir en la cantidad de agua disponible y en su calidad. También compartimos la preocupación por el impacto diferenciado que suponen las graves consecuencias de estos eventos para las mujeres.

Por lo tanto, instamos al Gobierno a que elabore planes de actuación con medidas dirigidas a mejorar y fortalecer las herramientas necesarias para evaluar y dar seguimiento al riesgo de desertificación, así como a paliar el efecto de la sequía y la escasez, promoviendo la gestión sostenible del agua. Consideramos fundamental que mediante estos instrumentos se analice en detalle las consecuencias que la desertificación y la sequía están teniendo sobre el empleo y sobre la sociedad en su conjunto, especialmente las mujeres. En este sentido, es necesario cumplir cuanto antes con lo establecido en la Estrategia Nacional de Lucha contra la Desertificación aprobada en junio del año pasado.

MATERIAL DE LA ONU PARA DIFUSIÓN