El Comité Ejecutivo de la CES aprueba una declaración de solidaridad con Groenlandia

La Confederación Europea de Sindicatos, de la que UGT forma parte, apoyan la autonomía de Groenlandia frente a las amenazas de Donald Trump

Fecha: 18 Jun 2025

Declaración de la CES sobre Groenlandia

El Comité Ejecutivo de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), del que UGT forma parte, ha aprobado por unanimidad una declaración de apoyo y solidaridad con el pueblo de Groenlandia.

La declaración se aprueba después de que en noviembre de 2024 el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volviera a plantear que su país podría hacerse con el control del país ártico, una amenaza que tanto el dirigente como su gabinete, ya habían lanzado en otras ocasiones dejando entrever, incluso, la posibilidad de que el control se iniciase por la vía militar.  

Por ello, la CES ha querido mostrar su solidaridad con la Confederación Nacional de Sindicatos de Groenlandia (SIK) y con el pueblo al que representa, y condenar y rechazar los intentos de coaccionar, presionar o socavar la voluntad del pueblo groenlandés por parte del mandatario estadounidense.

Cabe recordar que Groenlandia es parte de la comunidad nórdica y un territorio autónomo dentro del Reino de Dinamarca, que guarda su inalienable derecho a la autodeterminación y a la inviolabilidad de su territorio.

En ese sentido, el comité ejecutivo de la CES reafirma el derecho a inexpugnable a la autodeterminación y su derecho a sentirse seguros en su propio país, un derecho que pertenece a todos los pueblos. Ninguna nación tiene derecho a amenazar la seguridad de Groenlandia.

Ninguna nación tiene derecho a amenazar la seguridad de Groenlandia 

El pueblo de groenlandés ha expresado claramente su postura rechazando las reiteradas amenazas de injerencia extranjera. También lo ha hecho el presidente de la SIK, Jess G. Berthelsen, “Groenlandia ha dicho no, no porque estemos en contra de nadie, sino porque defendemos algo. Defendemos el respeto. Por la dignidad. Por la integridad. En una época en que las superpotencias operan mediante amenazas y presiones económicas, Groenlandia recuerda al mundo que hay países que no se pueden comprar".

La ultraderecha está haciendo de la amenaza a la seguridad y los derechos bandera y acción política, en todo el mundo, poniendo en peligro el bienestar, la soberanía de los pueblos y la paz y, en este contexto, la solidaridad de la clase trabajadora frente a la bandera imperialista, se muestre como se muestre, resulta, además de una muestra de dignidad, un refrendo a la paz y a la autonomía, reafirmando que la verdadera fortaleza radica en el respeto mutuo y la cooperación pacífica entre naciones.

 


Fuente: UGT