La Unión General de Trabajadores reclama la necesidad de que la Unión Europea limite la entrada de fondos buitre en los servicios sociales básicos. Fondos caracterizados por comprar deuda soberana o empresas con dificultades económicas para luego presionar y cobrar la totalidad de esa deuda, más los intereses, sin negociar quitas o reestructuraciones.