La UE que queremos no se entiende sin la migración y la movilidad
Fecha: 23 May 2019
Cristina Antoñanzas interviene en el 14 Congreso de la CES
La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, ha reclamado un movimiento sindical “que defienda los derechos y la igualdad en el trabajo, con independencia de la nacionalidad, y que exija a las autoridades nacionales y de la Unión políticas de migraciones, de movilidad y de asilo justas, que no admitan interpretaciones sobre normas internacionales que desvirtúan los derechos”.
Cristina Antoñanzas ha realizado estas declaraciones en el panel 6: “Una migración y una agenda social basada en la solidaridad, igualdad e inclusión” del 14 Congreso de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), donde ha señalado que “la Unión Europea que queremos no se entiende sin la migración y la movilidad. Más del 7,5% de la población total es migrante no comunitaria o nacional de un Estado miembro que vive en otro diferente. Y este porcentaje es mayor aún en el caso de la población empleada, el 8,5%”.
Para Antoñanzas, “las narrativas dominantes están tomando a los migrantes de terceros países como chivos expiatorios para alejar el foco de los verdaderos problemas de la Unión y de los responsables que nos han conducido a una situación de precariedad, desigualdad y segmentación social y laboral”.
“Tenemos que defender la igualdad de trato y oportunidades”, ha demandado, “el respeto a los derechos humanos y a las normas internacionales, entre otras, en materia de asilo, y confrontar esta narrativa dominante”.
Defender los derechos de los migrantes
Para la Vicesecretaria General de UGT hay que “evitar que los derechos de las empresas tengan prioridad sobre los derechos de los trabajadores desplazados, que éstos puedan ser explotados o el abuso de la subcontratación. Para nosotros la Autoridad Laboral Europea, aunque manifiestamente mejorable, es un primer paso, y el movimiento sindical debería contribuir a que evolucionara y fuera un órgano eficaz y sancionador en la defensa de derechos”.
Al mismo tiempo, es necesario “afrontar que existen lagunas en la regulación europea que están permitiendo que agencias de colocación, empresas de trabajo temporal y otros operadores, promuevan el traslado de trabajadores a otros Estados miembros con la promesa de unas determinadas condiciones de empleo que no se cumplen, y que incluso pueden acabar en explotación”.
Cristina Antoñanzas ha reclamado también “hacer frente a la degradación del derecho de asilo. Es imprescindible una política de migraciones y de asilo común, pero nos oponemos a la propuesta de la Agenda Europea de Migración, que es defensiva, utilitaria y no cumple con las obligaciones internacionales”.
Además, “tampoco podemos admitir vías de migración regular, selectivas, con derechos diferentes para los trabajadores y trabajadoras y sus familias, según la cualificación o la entidad que contrata”.
Acabar con la explotación laboral
Para la Vicesecretaria General de UGT, resulta fundamental “luchar contra la trata de seres humanos sea cual sea su nacionalidad y contra la explotación laboral de los migrantes sea cual sea su condición legal, sancionando al empleador, y asumir la responsabilidad que tiene la propia Administración por haber permitido esa explotación”.
En este sentido, es necesario “dar a los trabajadores víctimas de infracciones laborales graves, o incluso de delitos, la posibilidad de acceder a un documento legal, para proteger y detectar estas situaciones en el mercado de trabajo, que a veces son de carácter transnacional, debido a las cadenas de subcontratación”.
Además, ha reclamado “luchar contra la figura del trabajador pobre, que se está enquistando en este colectivo. La pobreza como consecuencia de la segmentación laboral tiene repercusión en todos los ámbitos de la vida y, además, se transmite a las generaciones futuras, por lo que debemos impedirlo”.
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